Por Andrea García.
http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/01/10/visita-del-papa-a-mexico-sin-tinte-politico-nuncio-3128.html
Será necesario repensar el papel de las religiones en la vida de los y las sujetos, ese pensamiento no debe imponer sus creencias sobre las creencias, eso es discurso del amo y en tanto tal es perverso. Pero cada uno debería ser libre de decir lo que piensa, conscientes de que el libertinaje y la irresponsabilidad para con los otros ¡no son la libertad! Un pueblo de verdad democrático (y es discutible si la democracia es lo mejor para un pueblo) es un pueblo letrado que toma consciencia de sus decisiones y su responsabilidad social, si tú haces algo que perjudique a otros en nombre de la democracia, eso no es democracia, es fetichismo del poder, por eso no existen las guerras en nombre de Dios, pero cada uno debe librar su batalla por vivir su propia vida pensando por sí mismos, y si tu deseo es creer en Dios, la sociedad debería permitirte hacerlo. Mucho he escuchado de algunos religiosos que Nietzsche es el anticristo, yo pienso que esos ignorantes son los verdaderos anticristos, porque la filosofía es una de las herramientas que debería hacernos libres, sería inclusive muy bueno que si tú decides creer en Dios y profesar alguna religión leyeras a Nietzsche profundamente, así encontrarías algunos fundamentos para no tener una consciencia de rebaño en tu supuesta fe, Nietzsche te ayudaría a ser libre para decidir si creer o no, pero tener una voluntad de amor, y llevar una vida espiritual más humana.
Por eso es necesaria una genealogía de la política de la religión para ponerla en entre dicho.
La política del Papa no puede ser neutral. Mi postura es que sí existen religiones estas deberían estar al servicio del sujeto, no al revés. Dios también es una cuestión política creas o no creas en él. Ahí está la Teología de la Liberación. Respetar la libertad de culto es un acto político de libertad y respeto al diferente que haría de nuestro mundo, un mundo mejor para todos, porque los problemas sociales que enfrentamos mundialmente no son de Dios, es decir,son inhumanos.
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