viernes, 9 de septiembre de 2016

EL ARTE: RESISTENCIA Y SOLUCIÓN AL SISTEMA CAPITALISTA.

     Hoy leía "El Torito" (órgano de difusión de Tejiendo Organización Revolucionaria), donde habla de la lógica capitalista que pretende imponer en nuestras vidas este sistema: volver la vida mercancía.

     Mientras lo leía se subió al metro un anciano, nadie le cedía el asiento. Mujeres viendo su celular o retocándose el maquillaje pues ya a las 4 de la tarde se les ha corrido el rímel, que va eso no es belleza: ¡Qué mierda es esto! ¡Qué feas se veían esas mujeres con tanta horrible indiferencia ante la injusticia!

     Yo venía de mi taller de poesía, y sé que la poesía constituye las antípodas del capitalismo, tal y como dice Bataille. Y por ello no trate a este anciano como mercancía y le cedí mi asiento. No espero aplausos por hacer lo correcto y lo verdadero. Tampoco espero que me encuentren bella. Todo lo que deseo es un mundo bello, lleno de poesía: ¡sublime! Por ello me aventé un torito y embestí al capital. En los pequeños actos de la vida cotidiana está la diferencia entre arte y capitalismo. Y antes de esto, por la mañana, subí al metro donde una pobre mujer indigente pedía limosna acompañada de (tal vez su hijo) un muchachito con problemas cerebrales. ¡Qué mierda es este sistema! ¡Les dí el dinero de mi agua, no tome agua en todo el día hasta que llegue a casa! Pero insisto no es loable hacer lo correcto. Por ello es preciso, justo y necesario cambiar el mundo. Le di dinero para ayudar a que coman o tomen agua un día, pero como decía Freire: lo preciso no es ello, sino cambiar el mundo, el sistema que los tiene oprimidos, en la miseria. Sí, me dolió hasta el alma: ¿quién verá por este muchachito que no entiende este mundo? Yo tampoco entiendo este mundo, y por rebelde a las injusticias también me acusan de padecer de enfermedades mentales. Hable con lagunas personas y hay una buena noticia: ¡verán por este muchachito y su mamá!

     Con pequeños actos le cambias el mundo a alguien. Si todos hiciéramos algo, aunque mínimo, por alguien más, ¡cambiaríamos el mundo! La pedagogía me hace tener esta visión. Me hace saber con certeza que el mito no es cambiar el mundo, el mito es creer que no se puede cambiar el mundo. Mitos fetichistas que nos hace creer el capitalismo, consciencia mágica, perversa. Alguna vez escuche en pedagogía a supuestos docentes que decían que no se puede cambiar el mundo, ¿aberrante no? ¡Qué mierda es esto! Por fortuna conocí gente grande entre los grandes, que saben también con certeza ¡que Otro mundo es posible! Y por ello hay que denunciar lo que quiere ocultar el capitalismo: "la poesía, el arte". En mi camino también vi un camión de refrescos de una famosa empresa internacional que vende mercancías en cantidades de cientos de miles de millones en todo el mundo. El camión tapaba un muro donde está escrito este verso de Becquer: "El amor es un rayo de luna", detrás del capitalismo, alcancé a ver el rayo de luna. Será preciso desocultar y revelar el ser oculto por el capitalismo. ¿Te sumas a la lucha política?...

     Los dejo con un poema muy conocido de Juan Gelman:


TODA POESÍA ES HOSTIL AL CAPITALISMO.



toda poesía es hostil al capitalismo
puede volverse seca y dura pero no
porque sea pobre sino
para no contribuir a la riqueza oficial

puede ser su manera de protestar de
volverse flaca ya que hay hambre
amarilla de sed y penosa
de puro dolor que hay puede ser que

en cambio abra los callejones del delirio y las bestias
canten atropellándose vivas de
furia de calor sin destino puede
ser que se niegue a sí misma como otra

manera de vencer a la muerte
así como se llora en los velorios
poetas de hoy
poetas de este tiempo

nos separaron de la grey no sé que será de nosotros
conservadores comunistas apolíticos cuando
suceda lo que sucederá pero
toda poesía es hostil al capitalismo



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